Mucho antes de nacer empezamos a escuchar dentro de la barriga de nuestra madre. Los primeros sonidos que percibimos son el latido de su corazón, los ruidos de sus tripas o el palpitar de sus arterias. Un poco más tarde, reconoceremos su voz y también algunos sonidos del exterior. A continuación, los profesionales de Audires explicamos en qué consisten las pruebas de audición para los bebés.

Según los datos de la Confederación Española de Familias de Personas Sordas (FIAPAS), 3 de cada 1.000 bebés que nacen en España tienen problemas de audición. En nuestro país, existe un protocolo de actuación para conocer la audición de nuestro bebé. La primera prueba se realiza a las pocas horas de vida del recién nacido, después pasada una semana, a los 15 días y al mes.

El cribado neonatal auditivo, es una prueba objetiva que se le realiza a todos los niños en cuanto nacen, que consiste en transmitir unas emisiones sonoras a su conducto auditivo. Se hace mediante un pequeño adaptador que emite sonidos y recoge las respuestas que se producen en la cóclea.

Desde la Universidad de Harvard, indican que lo normal es que la pérdida de audición no se detecte «hasta que el niño tenga dos, tres incluso cuatro años». Estas edades coinciden con «el periodo crítico para el desarrollo del lenguaje», que es «entre el nacimiento y los tres años». No detectar y tratar la pérdida de audición en bebés «puede provocar problemas serios en la capacidad del habla del niño».

Por ello, es muy difícil detectar la pérdida de audición en los recién nacidos. Sin embargo, deberemos prestar especial atención a su desarrollo, para que en el caso de que pueda existir pérdida de audición pueda actuarse cuanto antes, y así evitar que esto pueda perjudicarle en su crecimiento y desarrollo personal

Para cualquier duda o consulta, puede rellenar todos los campos del siguiente formulario y desde Audires, centros auditivos en Leganés y Getafe, estaremos encantados de ayudarle.