El oído comienza a formarse en el útero materno y termina su desarrollo en el tercer mes de embarazo. A partir de este momento, se puede decir que el bebé puede oír, aunque los sonidos que le llegan están amortiguados por el líquido amniótico y tejidos de la madre. Una de las primeras pruebas que se le hace a los niños al nacer es la de la audición, para comprobar que si hay algún problema.

Los factores que influyen en la hipoacusia infantil pueden ser varios . En el 80% de los casos ocurre en el momento del nacimiento o en los primeros meses de vida. Esto puede ser por infecciones de la madre durante el embarazo, problemas en el parto o por un motivo genético. La pérdida de audición en los niños, afecta a la pérdida del lenguaje y del habla y también influye en el comportamiento y en las habilidades sociales que los niños van desarrollando.

Uno de los primeros problemas de audición en la primera etapa de la infancia es la otitis. Esta puede ser externa, suele ocurrir en verano y no provoca pérdida de audición. La otitis medias – agudas, se suelen dar en invierno y si causan pérdida, ademas la otitis serosa que es cuando el moco se queda dentro del oído del niño afectando también a la audición.

Para saber que los niños se van desarrollando sin problemas, tenemos que observarles desde el mo-mento del nacimiento. Hasta los tres primeros meses, al bebe le sorprenden los sonidos y se despierta con los ruidos. De los tres a los seis meses le gusta jugar con cosas que suenen y busca la fuente sonora. A partir de los ocho meses le gustan cada vez más los juguetes sonoros y a partir del primer año comienza a decir sus primeras palabras.

Una vez que el niño va al colegio, si es demasiado inquieto o no participa en las actividades puede que padezca una deficiencia auditiva. Consulte a nuestros expertos de la audición en Audires cualquier duda que tenga sobre la audición de su hijo. Le ayudaremos a buscar una solución lo antes posible.